Esta pieza en particular presenta debilidad de troquel en el reverso, mientras que en el anverso, presenta laminación del cospel.
Tomado de aquí:
Medalla de san José asociada con la fundación de la orden de los misioneros josefinos de México en 1872. El padre fundador es de origen español, el padre José María de Vilaseca (1831-1919), en 1871 fundó la revista El Propagador de la devoción a san José que se sigue publicando. Esta orden se encargó de promover esta devoción en México a finales del siglo XIX, actualmente tiene muchos colegios y tienen un cento de estudios josefinos, el de México es el segundo más importante que tiene la orden.
saludos
Medidas. 3 x 2.3 cm
Datación: XIX
Anverso: "SEÑOR S. JOSÉ PROTECTOR DEL CLERO R.P.N."
Reverso: ASOCIACIÓN UNIVERSAL DE LOS DEVOTOS DEL SEÑOR SAN JOSÉ ESTABLECIDA EN MÉXICO AÑO DE 1872"
Peso: 8 gr.
Tesayma agregó:
Curiosa iconografía para san José, que a modo de Virgen de la Misericordia, protege bajo su manto a todo el clero. Ya apuntaba Reau, que ésta imagen fue tomada por todas las Ordenes religiosas para representar a sus fundadores: santa Teresa, san Bruno, ... Por tratarse de la parentela de la Virgen, los ángeles tenantes sujetan el manto de San José, que tiene sus manos sosteniendo al Niño y a su principal atributo: la vara florida. Iconografía muy interesante.
Copia de aquí:
El padre Vilaseca Nació el 19 de enero de 1831 en Igualada, España; y fue bautizado con el nombre de José Jaime Sebastián.
Ingresó al noviciado el 2 de abril de 1853 y profesó como religioso en la Congregación de la Misión el 3 de abril de 1855. Debido a su devoción a la Madre de Dios, añadió a su nombre el de María. Recibió la ordenación sacerdotal el 20 de diciembre de 1856, poniendo a San José como padrino de su primera Eucaristía y en ese mismo año se traslada a México para llevar a cabo labor misionera.
Su labor sacerdotal dio inicio en una época difícil para la Iglesia en México ya que en 1857 fue jurada la Constitución política del nuevo Estado mexicano con lo que comienza una persecución contra la Iglesia.
El 8 de diciembre de 1870, el Papa Pio IX proclamaba a San José Patrono de la Iglesia Universal y fue esto lo que lo llevó a sentir la necesidad de propagar la figura de San José; fue el momento en que el P. Vilaseca sintió la devoción josefina como un regalo de María. Empezó a editar una revista que difundiera la figura de San José: El Propagador de la devoción al Señor San José y a la Sagrada Familia. Un año más tarde publicó: ¿Quién es José? Estableció la Asociación de los devotos del Señor San José."